Arándanos: 10 consejos para plantar

Los arándanos no solo son deliciosos, sino que también son muy fáciles de cultivar. A continuación, te revelamos diez consejos prácticos para que cultives esta planta en tu propio jardín.

Arándanos
Los arándanos no solo son deliciosos, también se pueden cultivar en el jardín. [Foto: Andris Tkacenko/ Shutterstock.com]

El arándano azul (Vaccinium myrtillus) es conocido y amado por muchos, ya que no solo es increíblemente sabroso, sino que también es extremadamente saludable, por ejemplo, se dice que las bayas tienen un efecto antioxidante y antiinflamatorio, muy beneficioso para el organismo. Además, gracias a que posee un sabor dulce y delicioso se ha convertido en una de las bayas más populares de toda Alemania.

Aunque, si eres de las personas que no tiene ganas de buscar las pequeñas bayas en el bosque durante horas y mucho menos recurrir a los arándanos cultivados en el supermercado, no necesariamente tienes que prescindir de ellas, puesto que los arándanos también se pueden cultivar fácilmente en el jardín y aquí te contamos cómo tú también podrás comer arándanos de tu propio cultivo.

Como ya lo hemos mencionado anteriormente, las pequeñas bayas azules son muy populares, porque tanto su sabor, como sus propiedades logran convencer a todo aquel que las prueba.

Por lo tanto, hemos preparado un material donde te brindaremos los diez consejos que definitivamente harán que tu cultivo de arándanos sea un verdadero éxito.

La variedad correcta de arándanos

Cualquiera que haya recogido arándanos en el bosque cuando era niño se da cuenta rápidamente que existe una diferencia entre los arándanos silvestres y los cultivados. De hecho, los arándanos cultivados no provienen de nuestros arándanos silvestres nativos, sino del arándano americano (Vaccinium corymbosum), así como las plantas que se ofrecen en las tiendas especializadas también suelen ser de arándanos cultivados, los cuales tienen la ventaja de crecer más rápido y producir mayores rendimientos.

Mientras que el arándano silvestre, por otro lado, es más fácil de cuidar, pero a menudo solo produce algunas bayas. Por lo tanto, para poder cosechar una cantidad significativa de bayas más adelante, es aconsejable elegir variedades de arándanos cultivados; pero quizás la elección no sea tan fácil, ya que existen más de 100 cultivares diferentes.

Por suerte, hay una gran cantidad de estas plantas que se diferencian entre sí, sobre todo, por el momento de la cosecha y en términos de robustez. La variedad ‘Vaccinium Bluecrop’ se considera particularmente robusta y resistente; pero las variedades ‘Pilot’, ‘Elizabeth’ y ‘Duke’ solo han demostrado su eficacia en los jardines de pasatiempos.

Arándano salvaje
El arándano silvestre es fácil de cuidar, pero produce solo unos pocos frutos. [Foto: Maryna Pleshkun/ Shutterstock.com]

Suelo especial para los arándanos

A la mayoría de las frutas y verduras les encanta el suelo neutro, como se puede encontrar en la mayoría de los jardines. El arándano, por otro lado, necesita un suelo muy especial, ya que, como planta de páramo y bosque, se adapta y se siente como en casa es en los suelos ácidos.

Las condiciones perfectas para los arándanos son valores de pH entre 4.0 y 5.0, pero estos valores no se consiguen en la mayoría de jardines, por lo que hay que utilizar algunos trucos a la hora de cultivar arándanos. Por ejemplo, en lugar de colocar la planta en un suelo de jardín normal, lo ideal es que se cave un agujero un poco más grande, el cual, se pueda rellenar con suelo especial de arándanos o suelo de rododendro y, por último, enterrar la planta en él, esto se hace para que el arándano se sienta cómodo en su jardín incluso sin suelo forestal.

Ubicación y vecinos de los arándanos

Al elegir una ubicación para los arándanos, no solo se debe mirar el suelo correcto, sino que el vecindario correcto también es crucial para la planta. Debe haber una distancia de al menos 70 cm entre las plantas de arándanos individuales, porque de lo contrario, las raíces sensibles de las plantas se interpondrán rápidamente entre sí.

Aunque los arándanos son auto-fructíferos, es mejor cultivar diferentes variedades al mismo tiempo. Por un lado, se puede alargar el tiempo de cosecha utilizando variedades que maduran a diferentes velocidades. Por otro lado, la fertilización mutua también aumenta el rendimiento de las plantas individuales.

arándano
El arándano es un buen vecino del arándano [Foto: Natalia Korshunova/ Shutterstock.com]

Plantación adecuada de arándanos

Una vez que se han creado las condiciones adecuadas para el arándano, finalmente se puede plantar y tanto el otoño, como la primavera se consideran la temporada ideal para hacerlo. Sin embargo, la mayoría de los jardineros prefieren el otoño, ya que le da a la planta más tiempo para acostumbrarse a la nueva ubicación y también se reduce el riesgo de que la planta se vuelva dominante durante la fructificación del verano.

Para ello, cava un hoyo de unos 60 cm de profundidad y un metro de ancho, coloca una lámina a los lados para que no entre una descarga calcárea en la planta, pon el arándano y llena el agujero con tu tierra especial. Por último, solo debes asegurarte de que la planta sea regada adecuadamente para que pueda crecer bien.

Acolchado de arándanos

El mulching es una práctica muy recomendada por expertos cuando se quiere tener una buena cosecha de arándanos, solo se debe colocar una capa de corteza y unas hojas o agujas de árboles, ya que simularían la capa de humus crudo que se produciría en el hábitat natural del arándano.

Además, esta práctica tiene tres ventajas, por un lado, la capa de mantillo ayuda a mantener el suelo ácido a largo plazo, lo que es muy beneficioso para las plantas que son sensibles a la cal como el arándano. Además, la capa de mantillo actúa como un fertilizante natural y libera nutrientes gradualmente para que el arándano se mantenga abastecido a largo plazo. Finalmente, la capa de mantillo también actúa como protección contra la evaporación, ya que, el arándano consume mucha agua, especialmente en verano y tiende a perder rápidamente su fruto cuando está seco.

Por lo tanto, una buena capa de mantillo puede hacer maravillas en una cosecha de arándanos.

Mulching de arándanos
El mulching es un verdadero consejo para una buena cosecha de arándanos [Foto: Miriam Doerr Martin Frommherz/ Shutterstock.com]

Riego adecuado de arándanos

El consumo de agua de los arándanos es enorme, especialmente en verano, por lo que es especialmente importante regar la planta con regularidad. Sin embargo, cuando se trata de la cantidad adecuada, se necesita un instinto seguro; ya que el suelo debe estar siempre húmedo, pero no debe provocar encharcamientos.

Por lo tanto, si la tierra alrededor del arándano se seca, solo producirá frutos pequeños o ninguno. El anegamiento repetido, por otro lado, conduce a la pudrición de la raíz y la planta comienza a enfermarse. Además, no se puede usar toda el agua para regar el arándano, dado que la planta es muy sensible a la cal; así como el agua del grifo o de pozo a menudo no es adecuada, es por ello, que el agua de lluvia que se recoge en un recipiente es la más indicada.

Use fertilizantes orgánicos para los arándanos

La capa de mantillo proporciona nutrientes al arándano durante un período de tiempo más largo, pero una fertilización adicional no daña la planta. Los fertilizantes orgánicos son de nuevo particularmente adecuados aquí. El compost no es adecuado para fertilizar los arándanos porque a menudo contiene demasiada cal.

Aunque, la mayoría de los fertilizantes minerales disponibles en el mercado tampoco son adecuados para los arándanos debido a su alto contenido de cal, es mejor utilizar un fertilizante universal principalmente orgánico, ya que libera lentamente los nutrientes y, por lo tanto, minimiza el riesgo de fertilización excesiva.

Cortar arándanos

El arándano no necesita una poda en el sentido clásico, debido a que es una planta que puede producir buenos rendimientos durante mucho tiempo, incluso sin un recorte regular. Sin embargo, en los casos donde los rendimientos disminuyen, puede valer la pena cortar el arándano.

Además, las ramas particularmente viejas o enfermas deben eliminarse con cuidado y también se pueden acortar los brotes muy extendidos. Sin embargo, es importante que solo se eliminen las ramas individuales, ya que la planta no puede soportar una poda radical.

Asimismo, es importante mencionar que el momento perfecto para cortar es en otoño o invierno, específicamente cuando la planta ya ha perdido sus hojas y bajo ninguna circunstancia debe congelarse durante el corte, puesto que, en el peor de los casos, la planta podría morir después del corte.

Arándano
Cortar el arándano puede ayudar si no desea que disminuyan los rendimientos [Foto: Maria Dryfhout/ Shutterstock.com]

Plagas y enfermedades de los arándanos

Afortunadamente, cuando se trata de plagas y enfermedades, el arándano es una planta muy robusta que rara vez se ve afectada e incluso solo reacciona de manera particularmente sensible es a la cal, porque esto le impide absorber nutrientes. La clorosis de las hojas, es decir, la decoloración amarilla que se produce en las hojas, es una clara indicación de que existe un alto contenido de cal en la tierra.

Por otra parte, los pájaros son otro enemigo del arándano, ya que a los animales emplumados también les encanta el sabor de la baya dulce y les gusta robar la deliciosa fruta del árbol. Para que los pájaros ladrones no consuman por completo los arándanos, se debe colocar una red sobre las plantas y de esta forma, los animales se mantendrán alejados y solo podrá cosechar los arándanos usted mismo en paz.

Cosecha y almacenamiento de los arándanos

Por supuesto, a uno le gustaría probar las frutas dulces cuando están maduras, pero la espera es particularmente valiosa con los arándanos, ya que solo cuando el toque rojo alrededor de la base del tallo se ha ido, es que se desarrolla el sabor completo. Además, que las delicadas bayas se cosechan mejor a mano.

El llamado peine de arándanos también se puede utilizar para ayudar con la cosecha, pero se necesita un poco de práctica para poder cosechar de manera rápida y eficiente sin recoger numerosas bayas inmaduras.

Después de la cosecha, los arándanos se pueden almacenar en el refrigerador hasta por dos semanas, pero es importante mencionar que suelen perder su aroma rápidamente. Por lo tanto, es mejor disfrutar de las bayas frescas o procesarlas lo más rápido posible para obtener una deliciosa mermelada. Los arándanos también son excelentes para hervir, congelar o secar.

Como dato adicional, te mencionamos que las bayas saben especialmente bien con queso quark, helado o tortitas.

¿Le gustaría tener más bayas en su jardín? ¡Entonces pruébalo con grosellas! Los sabrosos frutos rojos son una gran adición a cualquier jardín.